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Premio MN a la Fraternidad 2022

El 4 de febrero el Provincial de los MCCJ en España entregó el Premio MUNDO NEGRO a la Fraternidad 2022 a Doña Yvette Mushigo.

Cada año, los Misioneros Combonianos del Corazón de Jesús en España y la revista MUNDO NEGRO conceden el Premio Mundo Negro a la Fraternidad a una persona o institución que ha manifestado su compromiso a favor del continente africano. El premio tiene una dotación económica de 10.000 euros. Este año el premio recayó en Doña Yvette Mushigo, coordinadora de la red Synergie des Femmes pour la paix e la Réconciliation (Sinergia de mujeres por la Paz y la Reconciliación), con sede en Bukavu, al Este de República Democrática de Congo. El premio fue entregado el pasado 4 de febrero en Madrid à Doña Yvette Mushigo de manos del Provincial de los Misioneros Combonianos en España, P. Miguel Ángel Llamazares González.

Este fue el discurso de entrega del P. Llamazares:

«Qué bonito es poder reunirse en una apacible y fría tarde de un sábado de febrero en Madrid, y dejar que nuestras mentes viajen a lejanas regiones de África central, al este de R. D. de Congo. Es bonito poder sentarnos, hombres y mujeres, negros y blancos, creyentes o no, de diversas ideologías, jóvenes y personas que ya peinan canas, … digo, es bonito sentarnos juntos a escuchar, reflexionar y debatir sobre temas que nos pueden interesar, nos importan… o en los que, directamente y literalmente, hay quien se juega la vida. Es posible que a lo largo de la tarde hayamos pasado por diferentes estados emocionales; una tranquilidad curiosa por saber más, la desazón por confirmar lo ya sabido o incluso dolor e indignación por que sí, hemos tratado temas y hablado de realidades que provocan y duelen.

A la luz de los testimonios escuchados, ser mujer y vivir en algunas regiones de África (como en las regiones del Kivu Norte y Kivu Sur en R.D. de Congo) supone estar expuesta a vivir en un contexto social, político, incluso familiar, que en vez de proteger la vida de los más vulnerables: niños, ancianos y, también las mujeres, que son fuente de vida, la amenaza, la pone en peligro y la destruye…  ¡Cuanto horror y cuanto dolor! ¡Cuánta noche y tinieblas en la vida de esas mujeres!

Hay quien dice que las mujeres en África son fuertes. Y lo son. Que han aguantado y pueden soportarlo todo, incluso en situaciones terribles. Está claro que sí, que son fuertes, pero también es verdad que no todas pueden aguantarlo todo… ni tienen por qué soportar hasta lo indecible el sufrimiento causado por la violencia, por el deseo de poder y de riqueza, o por estructuras sociales injustas que benefician a unos pocos…

Hoy hemos escuchado el testimonio de una mujer sencilla y discreta al tiempo que firme y valiente que sí ha plantado cara a la situación, que lo lleva haciendo desde hace años y que no lo ha estado haciendo sola… Cada vez son más las mujeres africanas que plantan cara, que no se conforman con ser víctimas, que después de curar las heridas, o mientras aún las van curando, se unen, comparten, se informan y forman… recuperan la esperanza y se convierten en fuentes de vida y esperanza. Mujeres que no se evaden de la sociedad en que viven, sino que promueven el cambio unidas entre ellas y trabajando con ellos y con otras fuerzas en la sociedad. Que no van destruyendo a la contra, sino creando desde el caminar juntos.

Y esto no es un sueño, es un relato que es verdad. Tanto el horror y dolor descrito en las regiones del Kivu como la presencia de un grupo de mujeres que forman la red de asociaciones Synergie des Femmes pour la Paix e la Réconciliation que juntas, van abriendo caminos de sanación, de esperanza y de cambio con el diálogo, la denuncia, la formación sobre los derechos y la justicia. Madame Yvette Mushigo coordina esta red de organizaciones que buscan caminos reales para la paz, la reconciliación y la unidad en una sociedad herida por el odio, la violencia y la desigualdad.

¡Basta ya de la apropiación indiscriminada e injusta de recursos por los grandes a costa de los pequeños, ya sean líderes locales, nacionales, o grandes multinacionales!

P. Miguel Ángel Llamazares González

Porque sí, hay que decirlo: ¡Basta ya de tanto sufrimiento creado por la maldad humana! ¡Basta ya de poner el poder y el dinero por encima de las personas! ¡Basta ya de la apropiación indiscriminada e injusta de recursos por los grandes a costa de los pequeños, ya sean líderes locales, nacionales, o grandes multinacionales! ¡Basta ya de discriminar!

Hay que denunciar. Además, Madame Yvette Mushigo y la Synergie des Femmes pour la Paix e la Réconciliation nos muestran que el camino se hace paso a paso y que en cualquier situación hay vida y esperanza.

Los Misioneros Combonianos en España y nuestra revista “Mundo Negro” deseamos hacer entrega de un reconocimiento, el Premio Mundo Negro a la Fraternidad 2022 al movimiento Synergie des Femmes pour la Paix e la Réconciliation de R. D. de Congo. Es un honor hacer entrega del mismo a su coordinadora, Madame Yvette Mushigo, que nos acompaña y cuyas palabras, y sobre todo cuyo testimonio hemos tenido la oportunidad de escuchar. Guiados por sus palabras hemos viajado a Bukavu y las regiones en el este de R. D. de Congo, un país bien querido por los Misioneros Combonianos, donde estamos presentes desde hace años y de donde proceden un buen número de misionero combonianos, algunos presentes entre nosotros esta tarde.

El viaje, ya lo hemos dicho, no ha sido fácil pues las realidades que se viven en ese rincón del mundo son dolientes. Así lo ha denunciado el papa Francisco en su viaje a R.D. Congo que además ha hecho un llamamiento a parar el espolio y los abusos a los que está sometido el país. Es también allí que surgen personas que son auténticas luces de esperanza y nos queremos dejar contagiar por ellas.

Hacemos entrega del premio, que consiste en una placa y una dotación de 10.000 euros y quiere reconocer y apoyar el trabajo realizado por Madame Yvette Mushigo y la Synergie des Femmes pour la paix e la Réconciliation.

Muchas gracias. Merci. Asante Sana».

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